Bailaora profesional y coach artístico-emocional.
Tras dedicar mi vida a la danza y el flamenco he podido comprobar el impacto positivo del arte en mi crecimiento como persona.
Hoy soy una mujer segura de mí misma, que afronta con valentía los desafíos de la vida y que vive el ahora con más presencia que nunca.
Todos los días doy gracias a la vida por haber colocado al flamenco en mi camino, para mí, la mejor herramienta de gestión emocional que he conocido.