Existen dos grupos bien diferenciados: el que aplaude al gobierno (cualquiera que fuere) mostrando supinamente su obsecuencia y su servil forma de manifestarse en el mundo (collar verde), y el que está en contra del gobierno, basando su posición en pelotudeces místicas, que van contra toda base científica y pasándose los libros de divulgación académica por la mismísima raja (con collar celeste). En el medio de esta runfla de delirantes, estamos nosotros. Silenciados, pero ahí.