Todos tenemos un gran poder, solo necesitamos conocer cómo llegar a él.
Una vez liberes tu poder solo utilízalo para hacer el bien o defenderte del mal.
Jamás pongas en práctica lo aprendido para hacer daño o maldad alguna.
Toda capacidad a desarrollar como en cualquier otro orden de la vida exige aprendizaje y compromiso. Si te prometen poder sin trabajo es igual a que te prometan que serás cirujano sin estudiar. Todo está a tu alcance, solo debes aprender y trabajar sobre lo aprendido.