A mis 56 años después de ser diagnosticada con diabetes elijo vivir una aventura encarando mis miedos de vivir sola y de practicar minimalismo.
Llegué a sentir mi vida tan vacía que una vez mirando por la ventana de la cocina me di cuenta que ya no quería vivir esa rutina aniquiladora de los días de mi existencia.
Lo pensé por Un año y ahora, vivo mi vida como yo lo he decidido, VIVO EN MI CARRO Enfrentando el asunto más difícil “ El qué dirán”.
Sin Experiencia como YouTuber y con un gran ego me puse a ser vídeos sin ninguna guía pero con toda la voz de mi corazón. Muchas cosas no documenté al principio porque no quería mostrar mi vulnerabilidad, no quería reconocer que desapegarte de las personas es lo más difícil para un ser humano y no quería mostrar mis lágrimas pero mi voz lo decía todo.
No puedo decirte que todo es una aventura divina pero sí te digo que me han crecido unas alas enormes y que ahora soy muy agradecida con todo lo que tengo, y todo cabe en mi carro.