Asociación de laicos que unen la vida intelectual y de estudio con la vida de piedad, orientándolas al servicio de la Iglesia, por la que se tiene un profundo amor filial. La acción de la ACdP abarca toda la vida social y pública. El propagandista antepone su compromiso cristiano y su afán de testimonio evangélico -tanto en la vida privada y familiar, como en la pública- a cualesquiera otras consideraciones e intereses, adoptando actitudes inequívocas en favor de la verdad y la justicia y en defensa del ser humano.